Marfesa y el “Toro Orgulloso”.
El uso de la piedra natural se remonta a la prehistoria, periodo en el que el ser humano empieza a elaborar brazaletes o utensilios cotidianos así como construcciones más complejas como monumentos funerarios.
Pero ha llovido mucho desde entonces y las nuevas tecnologías han modernizado por completo el sector, permitiendo incorporar lo nuevo sin perder el encanto del ayer. Lo que antaño se hacía por talla directa hoy en día puede realizarse con ayuda de un control numérico. Conjugando la creatividad del imaginero con la tecnología más precisa, se consigue reproducir obras de gran valor artístico. Es el diseño del escultor, el aliento que permite dotar a la piedra natural, un material tan inerte e inmóvil, de vida, de alma.
Desde sus orígenes, allá por la segunda mitad del s.XIX, Mármoles Fernández no ha renunciado nunca a colaborar con artistas y plasmar con su saber hacer las creaciones más variopintas en piedra natural. Su último trabajo ha sido la reproducción de una serie de Toros del escultor y amigo, Pedro Rodríguez, Pedrín. Esta obra, el “Toro Orgulloso” realizada hace 20 años para una exposición en Ronda ha sido admirada por medio mundo, llegando incluso a formar parte del reparto la producción cinematográfica “Noche en el Museo II” y compartiendo espacio con obras de incalculable valor artístico como “El pensador de Robín”.
Las nuevas reproducciones se han elaborado en Calatorao, Rojo Alicante y Daino Reale, materiales con solera para una obra con temperamento. Sin duda un proyecto ilusionante cuyo resultado final pueden juzgar ustedes mismos.